De momento y hasta que los eléctricos no ofrezcan mucho más autonomía, un turismo de hidrógeno hace mucho más kilómetros con una carga. También emplean bastante el menor tiempo que un eléctrico en repostar, en tanto que tarda entre cinco y ocho minutos en llenar sus depósitos. Sus baterías no necesitan ser tan grandes y pesadas como las de un eléctrico clásico. Y el hidrógeno tiene una relación poder calorífico/peso mucho más alta que cualquier otro combustible. Si los fabricantes de coches tuviesen una bola de cristal que anticipase el futuro, se ahorrarían mucho tiempo y dinero, sobre todo a la hora de planear los lanzamientos y de centrar sus esfuerzos e inversiones en una determinada tecnología.
Los turismos híbridos, híbridos enchufables y eléctricos semejan estar conformándose como la opción más real para reemplazar más adelante a los motores de combustión. Pero hay otra opción alternativa con el hidrógeno, que unos pocos fabricantes están construyendo, y que también se expone como otra forma de respetar el medioambiente. Este tipo de coches tiene una pila de comburente, en la que el hidrógeno se mezcla con el oxígeno. Como resultado de este desarrollo químico, se crea electricidad con la capacidad de poner en marcha el motor eléctrico. Los turismos de hidrógeno no generan emisiones en su actividad. Vale, repostar un coche de hidrógeno es mucho más barato que llenarle el depósito a un vehículo de combustión; pero, ¿dónde se puede hacer la operación?
Coches
Este tipo de vehículo, llamado vehículo eléctrico de pila de combustible de hidrógeno , se semeja a un vehículo eléctrico en muchos aspectos. Al no bajar substancias nocivas, contribuirá a proteger el medio ambiente y achicar la contaminación grave ocasionada por el transporte clásico. Para permitir que el reconocimiento de los coches eléctricos aumente, es requisito disponer depósitos y surtidores correctos para este tipo de vehículos en las estaciones de servicio tradicionales.
- Si se revierte la reacción química de la electrólisis, esto es, si se combinan el oxígeno y el hidrógeno, se libera electricidad.
- De este modo, tanto el hidrógeno como los vehículos de pila de comburente son un paso posible en el futuro de la automoción.
- Podría marchar como extensor de autonomía para turismos eléctricos o como generador de electricidad para la red eléctrica.
- Al menos, hasta que no se sustituya por uno mucho más barato, como el citado antes de la Facultad Técnica de Berlín.
- Comenzó a comercializarse en Estados Unidos en el mes de julio de 2008 y, cinco meses después hizo lo propio en Estados Unidos.
“A fin de que despegue el mercado, la principal barrera en este preciso momento es la falta de infraestructuras”, concluye Carlos Merino. “Anteriormente, otra barrera importante era el acompañamiento público, pero en este momento existe una apuesta muy clara a nivel europeo por todas cualquier tecnología que deje la reducción de emisiones en el transporte”. Al hablar de coches de hidrógeno estamos hablando, en realidad, de varias tecnologías distintas que tienen como punto de encuentro este elemento químico, el mucho más ligero y sencillo que existe en el cosmos. “Contamos los que usan hidrógeno en un motor de combustión cambiado, los vehículos de autonomía extendida basados en hidrógeno y los vehículos de pila de comburente”, apunta Merino. En medio del ascenso de la popularidad de los vehículos eléctricos indudablemente poco hayas escuchado hablar en relación al turismo de hidrógeno, ¿verdad? Quizá una de las preguntas mucho más importantes, el auténtico “talón de aquiles” de los comburentes alternativos, es si hay suficientes puntos de recarga para que estos turismos sean ejecutables.
¿De Qué Forma Marcha Un Coche De Hidrógeno?
Y esto torna posible, además de esto, almacenar los excesos de energía del sol o eólica, por ejemplo, para algunos periodos en los que las horas de sol o el viento son escasos. Otra ventaja de este género de vehículos es que, en contraste a los coches 100 % eléctricos, aguantan mejor las temperaturas extremas. Apenas se ven cambios en las posibilidades del vehículo, y tampoco hay un cambio esencial en su autonomía, como sí sucede con los eléctricos. Hyundai fue la primera marca en inscribir un turismo con pila de combustible en el año 2018, con una recarga de entre 3 y 5 minutos. Tiene aptitud de 461 litros, se reposta como un vehículo convencional y transporta instalados tres depósitos de 52,2 litros cada uno de ellos. Otro de los inconvenientes en el momento de usar un vehículo de hidrógeno llega a la hora de hallar un espacio en el que poder llevarlo a cabo.
Hay que abrir la tapa del depósito y también insertar la manguera de carga en él. A continuación, apretamos el gatillo del dispensador y se genera un cierre hermético para evitar la fuga de gas durante la recarga. Una vez finalizada la recarga, quitaremos el pestillo de seguridad del dispensador y giraremos en el sentido contrario para desacoplarlo del depósito.
Desde aquí, el vehículo marcha como cualquier otro vehículo electrificado”, explica Carlos Merino. Derivados de la fuente de energía del petróleo, la gasolina y el gasoil pueden arrancar un coche, pero su utilización resulta muy contaminante. No obstante, el hidrógeno asimismo puede usarse para desplazar un vehículo, puesto que se trata de un comburente. Pero no es uno convencional, sino está caracterizado por ser limpio y sostenible, por el hecho de que en vez de CO2 emite vapor de agua, lo que lo transforma en una opción ideal para respetar el medioambiente. Y sucede que este gas, llamado H2, es inodoro, insípido e incoloro, y se pone de tendencia en la actualidad dentro de la industria automovilística. Este artículo unComo trata de mostrarte cómo marchan los turismos de hidrógeno.
Mientras que la electricidad resultante se guarda en las baterías para ir alimentando el motor, el agua sobrante, en forma de vapor, se expulsa. Ciertamente, los coches de hidrógeno sólo emiten vapor por el tubo de escape. La empresa israelí Aquarius Engines ha creado un sencillo motor de un solo tubo, 20 piezas y 10 kilos de peso que puede marchar con hidrógeno actuando de generador para cargar las baterías de un vehículo eléctrico.
Estos son los neumáticos, amortiguadores, sistema de frenos… deberemos sustituirlos cuando sea correcto, por el tiempo o paso de km que en cada caso, indique el fabricante. La membrana utilizada en estos motores es cara porque está llevada a cabo de platino. No obstante, hay trabajos para solucionar este elevado coste. Por poner un ejemplo, en la Facultad Técnica de Berlín han desarrollado una aleación de hierro que podría abaratar los costos mucho, de poder llevarse a producción.